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¿DE QUÉ TRATA ESTE E-
(INTRODUCCIÓN)
Los procesos actuales de integración en el mundo, datan de larga fecha, sobre todo, los nacidos después de la creación del acuerdo general sobre aranceles y comercio (GATT) en 1947 y posteriormente con el nacimiento de la organización mundial del comercio (OMC) en 1994. La década de los noventas, sin lugar a dudas, marca el inicio formal de los acuerdos de alcance regional mayor.
México, después de su ingreso al GATT en 1986, empezó a explorar posibles acuerdos de libre comercio, lo que se cristalizó en 1992, con la firma del TLCAN y su entrada en vigor en 1994. A partir del TLCAN y su política de pretendida expansión y/o diversificación comercial, se insertó en la globalización económica, con una política comercial internacional, con pretensiones estratégicas, para beneficiarse de las políticas de apertura y liberalización comercial que, antepuso Estados Unidos a muchos países, para mantener altas relaciones comerciales.
La inserción de la economía mexicana a la economía global inicios de la década de
los noventa, sus políticas económicas nacionales de liberalización y apertura económica,
le llevaron a firmar diversos acuerdos comercial, después del TLCAN, siendo la región
asiática del Pacífico (el mecanismo de cooperación Asia Pacífico –APEC-
A prácticamente dos décadas de la firma e implementación de acuerdos de libre comercio y de acuerdos regionales de integración, México aún se encuentra inmerso en el debate en torno a los presumibles beneficios que esa política de apertura y liberalización le traería.
Obviamente que, aunque se han realizado innumerables foros y estudios en torno a los beneficios de las políticas de apertura y liberalización llevadas a cabo por México y en particular de los beneficios de los acuerdos de libre comercio, los resultados finales, no son consensuados por los estudiosos ni dejan satisfechos a todos. Ello es característico de prácticamente todos los países.
Independientemente de que aún no exista un consenso en torno a los resultados de dos décadas de apertura, México enfrenta el problema de seguir siendo un país subdesarrollado, en vías de desarrollo o emergente, según se quiera, con las características de dicho tipo de países. Al igual que muchos países, confió en que el libre comercio y la apertura, le permitiría avanzar en sus metas económicas y sociales.
Si pudiera pensarse en que fuera posible un nuevo estudio, objetivo, neutral y completo, tendría que aceptarse que el libre comercio funciona, si y solo sí, va acompañado de políticas internas y de políticas externas, no solo del resto de los países sino de los organismos que tienen que ver con el comercio y la economía internacional, que lo promuevan y faciliten realmente. De otra manera, los estudios seguirán siendo sesgados y parciales.
Asimismo, se deberá de tomar en cuenta, que la economía internacional y el libre comercio, no funcionan por si solos, que son parte del todo social organizado económicamente en sus diversas escalas: local, estatal, regional, nacional, internacional y global e inclusive, que se retroalimentan mutuamente. Si se acepta esto último, se abre la posibilidad de incluir en el análisis de la economía internacional globalizada y del comercio internacional, tópicos igualmente o más importantes que ella o él mismo.
Esa es la intención de este libro, la de proponer un conjunto de temas, en los que si bien, los procesos de integración y regionalismo están presentes, también lo está implícitamente el tema de la competitividad, que es subyacente a prácticamente todos los temas y tiene su contraparte, en los países que presentan mayor capacidad para generar y ampliar sus mercados internacionales de exportación; lo mismo puede decirse del tema del siglo XXI: la sociedad o sociedades del conocimiento, con todos sus avatares y asegunes. De hecho, la expectativa del siglo es que, la o las sociedades del conocimiento más competitivas, serán las que mejor desempeño económico tengan en la confrontación económica internacional y por ende, mejores resultados tengan en sus indicadores sociales, suponiendo que hay correlación lineal directa entre altos índices económicos y beneficios sociales.
Los autores de este texto, esperan que el lector, pueda encontrar, de manera sencillamente explicados, argumentos e ideas que le hagan surgir el interés en los diversos temas que lo componen, pues todos ellos, organizados en capítulos temáticos, pretenden ofrecer una perspectiva amplia, sobre las sociedades del conocimiento, la relación histórica de la economía con la propiedad intelectual e industrial así como con los derechos de propiedad; igualmente, analizar los efectos e implicaciones que se han tenido en México, derivado de su participación en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); los impactos sectoriales e industriales así como las implicaciones sobre el propio bloque comercial.
La participación de México en la economía global y en Asia Pacífico, queda de manifiesta, al analizar sus relaciones con países como Singapur, Corea del Sur y la perspectiva agrícola comparada con China. Tales comparaciones, no son sutiles, sino que llevan una finalidad intencionada. No obstante de que México lleva más de dos décadas de estar vinculado al Asia Pacífico, aún sus niveles de competencia y competitividad, se encuentran lejanos de ser considerado realmente un actor o contrincante de cuidado para la mayoría de estos países.
De ahí la pertinencia, de volver a insistir y en torno a la necesidad de un análisis
de la política económica, de desarrollo y económica, por qué no, para intentar realizar
un ajuste a las políticas de desarrollo, que aún deben formularse, para llevar a
México a otros estadios de desarrollo y de relaciones económica y comerciales con
el exterior.
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